Fundación ONCE América Latina (FOAL)

Las manos de estos chicos y chicas de El Callao, en Perú, sirven para mucho más que para asir objetos, agarrarse o acariciar. Son 15 personas con ceguera y sordoceguera para las que sus manos constituyen el modo de acceder a la lectura, de conocer cómo son las cosas e, incluso, de comunicarse con los demás.

Ahora se están formando en panadería y repostería, convirtiendo sus manos en su principal herramienta, también en el trabajo. Mientras aprenden, van ilusionándose y trazando el modo en que esta formación les puede abrir puertas al mercado laboral, en un país en el que solo 15 de cada 100 personas con discapacidad tienen trabajo. Con ese panorama por delante, el autoempleo es la salida más factible y ya han plasmado su idea en un plan de negocio encaminado a elaborar “bocaditos” para catering de eventos empresariales, de entidades públicas, etc.

Apoyarles en la puesta en marcha de su negocio es darles una oportunidad de salir adelante, de que logren su independencia económica, de que además de ser capaces, se sientan y los vean capaces.

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